Aplicadas al siglo XIX, estas dos palabras ('sinfonismo' y 'español') pueden parecer a muchos una contradicción en los términos, más o menos como aquello que dijo Pío Baroja cuando lo invitaron a colaborar con el diario carlista El Pensamiento Navarro. Muerto Arriaga a comienzos de 1826, diez días antes de cumplir los 20 años, arruinada la nación por las onerosas destrucciones y los exilios ocasionados por la Guerra de la Independencia, eliminada toda influencia del exterior por la ominosa política de un desgraciado Borbón, lo raro habría sido que en España hubieran quedado fuerzas, dinero y talento para la fundación de agrupaciones sinfónicas, que sin ellas qué iban a hacer los compositores locales componiendo música orquestal. Valga un dato: en 1850 en España todavía no se había escuchado una sinfonía de Beethoven al completo.
El erial no había sido en cualquier caso absoluto (en los años 30 y 40, Ramón Carnicer había escrito al menos un par de sinfonías y sin duda debieron de escribirse otras), pero no sería hasta la segunda mitad del siglo, en especial hasta su último tercio, cuando el género conoce cierto reverdecer, apoyado en la música escénica y la creación de sociedades filarmónicas y de conciertos (y lo de reverdecer viene porque no hay que olvidar que a finales del siglo XVIII habitaron España sinfonistas como Brunetti, Boccherini, Baguer y Moreno entre otros muchos). Datan de entonces (de finales del XIX) páginas sinfónicas de cierto relieve de Bretón, Marqués, Zubiaurre, Olmeda, Serrano o Giménez, obras en general entre italianizantes y afrancesadas, algo alejadas en general del estilo centroeuropeo, donde en el fondo se había cocido y se estaba sustanciando el futuro del género. Pasa con estas obras como con la momia de Fernando III el Santo, que hay individuos a los que llena de inquietud saber de su existencia, sus expectativas se desbordan mientras esperan en la cola de la Catedral de Sevilla el 30 de mayo y cuando por fin llegan hasta ella y la ven terminan exclamando: "¡Ah!, ¿pero era esto?". Algo parecido me ocurrió a mí cuando hace unos años la Sinfónica de Sevilla presentó en Cádiz un par de sinfonías de Pedro Miguel Marqués o cuando el año pasado hizo lo mismo la Camerata del Teatro Falla con obras sinfónicas de Jerónimo Giménez. ¡Ah! ¿Era esto?
Como punto de partida, conviene por ello admitir que el legado sinfónico español del siglo XIX es pobre en cantidad y calidad comparado con el europeo. Y no hay que rasgarse ningún traje por ello. Bien está profundizar en el conocimiento de estas obras. Hay que editarlas, presentarlas al público y grabarlas cada cierto tiempo para conservar la huella sonora que cada generación de intérpretes deja en ellas. Si después alguna se incorpora al repertorio de alguna orquesta bien estará, y si no, pues tampoco pasa nada. En cualquier caso, habría que valorar como música sinfónica no sólo las grandes obras orquestales independientes, sino también los preludios y oberturas de las obras escénicas (ahí está en el fondo el origen del género sinfónico) y de esos, los compositores decimonónicos españoles pueden presumir de haber dejado un legado nutrido y de muy notable interés.
Ruperto Chapí (Villena, 1851 – Madrid, 1909) ha perdurado en la memoria del melómano español medio como autor de algunas de las zarzuelas más conocidas y brillantes jamás escritas, pero su voluntad fue siempre la de convertirse en un autor de sinfonías y óperas de éxito, para lo que se marchó incluso a estudiar a Roma. Sus primeras obras tuvieron pues como objeto la orquesta, como el curioso Scherzo Combate de Don Quijote contra las ovejas, pieza de carácter descriptivo escrita a los 18 años. Algo posteriores, y de más enjundia, son la Fantasía morisca, la Polaca de concierto o la Sinfonía en re, estrenadas todas en 1879. Al primer movimiento de la Sinfonía, un Allegro appasionato con una introducción lenta, no le falta interés, incluso resuenan en ella ecos beethovenianos, aunque luego la obra se va desinflando y perdiendo fuerza hasta terminar lastrada por el academicismo y la falta de cohesión de las ideas. Assumpta Sánchez Tormo la describe así: "Se vislumbra, desde el punto de vista del lenguaje utilizado, dos referentes sonoros: el italianizante, que se aprecia en el trabajo tímbrico y de textura que otorga mayor protagonismo a la cuerda y reduce a segundo plano la madera y el metal, y el germanizante, sobre todo en la técnica de transformación motívica heredada del sinfonismo de Beethoven. En el primer movimiento, toda la sección del desarrollo está basada en el arranque del tema principal, presentado en diversas tonalidades dentro de un proceso modulatorio centrado en las áreas del relativo mayor (fa mayor) y del cuarto grado (sol menor). Chapí recurre a efectos como el crescendo que prepara el tutti final al término del primer movimiento, o la propia estructura del segundo, que se inicia con una melodía pastoril seguida de una marcha a cargo del metal y una melodía de corte italiano, para terminar con una gradatio dinámica que conduce hacia un clímax que se apaga gradualmente al final del movimiento”. Posiblemente, su obra sinfónica de más alto interés sea, en cualquier caso, un poema sinfónico escrito en la madurez, Los gnomos de la Alhambra, que ha conocido en los últimos años cierto éxito en forma de registros fonográficos.
Por lo que hace a la ópera, antes de la sinfonía, Chapí ya había estrenado en el Real al menos un par de títulos en un solo acto (Las naves de Cortés y La hija del Jefté), aunque escribió por lo menos dos obras más, nunca estrenadas y hoy perdidas. En 1878 presentó otra vez en el Real una ópera grande, concebida en tres actos, Roger de Flor, aunque de ella sólo pudieron verse los dos primeros, pues el compositor la ofreció, aun inacabada, con tal de que el estreno coincidiera con los fastos por las segundas nupcias de Alfonso XII. Después, es bien sabido, el compositor intuyó que escribiendo sinfonías y óperas iba a ser muy difícil ganarse la vida en España y se volcó en un género más popular, el de la zarzuela, al que llenó de gloria.
Ruperto Chapí (1851-1909): OBRA SINFÓNICA Orquesta de la Academia del Gran Teatro del Liceo Director: Guerassim Voronkov
1. Sinfonía en re 2. Obertura de la ópera Roger de Flor 3. Scherzo Combate de Don Quijote contra las ovejas ---------- COLUMNA MÚSICA 1CM0176 (Diverdi) [61'14''] Grabación: Enero de 2007
Chapí: Sinfonía en re: I. Adagio. Allegro appasionato. [10'55''] Orquesta de la Academia del Gran Teatro del Liceo. Guerassim Voronkov
Pablo, me ha encantado la sinfonía de Chapí! Muy beethoveniana, jeje. La verdad es que si gente como él hubiera nacido en Francia o Alemania otro gallo les hubiera cantado... aunque por otra parte no tendríamos todas esas zarzuelas maravillosas que nadie más tiene.
Creo que intentaré hacerme con el disco. Cuánto se aprende leyéndote! es una gozada este blog, gracias :-)
Lo del pensamiento navarro (y la música militar) como gran oximoron siempre me ha encantado. Y estoy con Papagena, las zarzuelas de Chapí son maravillosas (vale, sí, soy zarzuelera de pro, las escuchaba de chica en casa de mi abuela y siempre me han gustado).
Yo también escuchaba zarzuela de pequeña en casa de mi abuela!!! de hecho, de ahí me viene la afición. Y de ahí al género lírico... ella adoraba a Alfredo Kraus, Pilar Lorengar y Manuel Ausensi :-)
Don Juan en la música
-
DON JUAN EN LA MÚSICA Introducción Hace unos cuantos años, bastantes me
temo, alrededor de estas fechas cercanas a la festividad de Todos los
Santos,...
Cuerpos deshumanizados
-
La compañía chilena La Re-sentida llegó en abril de 2022 al Kammerspiele de
Múnich con una obra que, en realidad, era una búsqueda en las raíces que
subyac...
Hotel Avec Jacuzzi Privatif Vaucluse
-
Suites romantiques avec jacuzzi privatif et love room avec piscine
intérieure privée et spa privatif en paca proche de marseille bouches du
rhône et davi...
"Il corsaro" en Les Arts - 01/04/2018
-
El primer deseo de componer una ópera sobre un libreto basado en *The
corsair* de Byron fue del propio Verdi, él encargó a Piave escribirlo, pasó
el tie...
Temporada #Liceu1718
-
Este mediodía se ha presentado la nueva temporada #Liceu1718, ya accesible
en la web y con los precios y zonas. Ante todo agradecer a los
colaboradores que...
Despedida.
-
musicoclasico parapoeta real y fantástico, autor de este blog,
desgraciadamente nos ha dejado para siempre. El blog por tanto no
incorporará nuevo material...
Philippe Jaroussky: La musicalidad innata
-
Philippe Jaroussky (contratenor)
Orquesta Barroca de Venecia
Andrea Marcon (clave y dirección)
Obras de Porpora, Leo, Sarti y Geminiani.
Ciclo Universo Bar...
Dígraf, de Joan Guinjoan
-
Llevábamos mucho tiempo sin traer algo de música contemporánea por aquí, y
eso no está nada bien. Precisamente eso es lo que pensaba el viernes pasado
v...
Nabucco desde la Scala
-
El pasado 13 de febrero podía verse en los cines la nueva producción de *Nabucco
*que la Scala de Milán ha puesto en pie en este año del bicentenario. De ...
Cuarteto Clásico de RNE (III). Años 50, 3 de 3
-
1. En Lieja (septiembre, 1955), durante la participación del Clásico en el
Concurso Internacional de Cuartetos.
2. En el comedor del Castillo de Wégimont ...
Culebrón de Pasión (otra vez)
-
[Estoy vago para escribir. Hay muchas cosas en el tintero pero no soy capaz
de juntar dos palabras. Así que para no abandonarles del todo les dejo una
entr...
I've moved!
-
***NEW YANKEEDIVA BLOG ADDRESS***Hello wonderful Yankeediva Readers!!May I
just take one moment to THANK YOU (each of you! Yes, YOU!) for taking the
time t...
Los grandes éxitos de siempre, una y otra vez...
-
Ayer asistí al concierto ofrecido por Musica Angelica en la principal sala
de Santiago. Un evento que no debería provocar mayores comentarios en la
prensa...
Das Experiment: La Bohème at the GNO
-
Mata Katsuli as Mimi
Convincing 12 colleagues to follow me on a Night at the Opera was easier
than I thought. A message with 18 recipients led to 12 positi...
Pasatiempos. 435
-
* Un recipiente tiene una capacidad de 700 L puede ser llenado abriendo
tres llaves al mismo tiempo. La primera vierte un volumen de 36 dm3 en 3
min, la...
Moriréis como en el 62, por Leonardo Giovannini
-
Para ilustrar el Jornal de hoy hemos plagiado el retrato del jurista y
escritor José Félix Huerta Calopa, obra de Julio Romero de Torres. En
nuestra vers...
TÍO VANIA, VUELTA Y VUELTA
-
Enfrentarse a Chéjov tiene su riesgo *per se* y también por la cantidad de
dramaturgos que lo vienen haciendo en el último siglo. El personaje de
Vani...
A propósito de Chaves Nogales
-
Juan Carlos Mateos Fernández ha escrito un libro lleno de inquina.
Parapetado en la exégesis de los editoriales del diario *Ahora* y en el
contenido de las...
Fkk Sauna Clubs Vorarlberg Anziehende Frauen
-
Escortservices in Österreich – Begleiterinnen, Call-Girls & Escortservice
in Österreich Willkommen auf ORHIDI.com – Dein ultimatives Ziel für
exquisite Beg...
Coleccionismo de cráneos entre los neandertales
-
Pocos miembros del linaje humano han sido tan malignamente representados en
la cultura popular como los neandertales. Desde su descubrimiento en 1856,
hast...
DISECCIONES
-
Ya a la venta en Amazon (versión tapa blanda y kindle) esta segunda edición
bastante ampliada y profundamente revisada de la que publicó Sloper en 2013...
Los asesinos de la luna, Scorsese
-
Martin Scorsese es una leyenda del cine. Aunque tiene películas que sin
ser malas solo se saben que son suyas por los movimientos ampulosos de
cámara y ...
Conoce tus elementos - El itrio
-
Seguimos hoy nuestro viaje por la tabla periódica en Conoce tus elementos.
En la última entrega de la serie hablamos sobre el elemento químico de 38
prot...
Nuevo libro: Cómo entender a los humanos
-
Las bases biológicas de la cultura, el lenguaje, la moral y el estatus Este
libro propone al lector un viaje a través del tiempo y de diferentes
disciplina...
¿Caso "tipo Levelland" en Tenerife?
-
La información sobre este caso consiste en un muy breve y muy dudoso
comentario en el libro de Jacques Vallée Fenómenos insólitos del
espacio.Continúa en e...
Mentir en política
-
Acabo de oír por la radio dos secuencias de declaraciones de políticos de
colores diferentes con un nexo: la mentira. Sólo citaré una de ellas:
Grande-Ma...
EL CELESTIAL DESENFRENO DE LOS DIOSES
-
Si hace apenas dos semanas celebrábamos en esta sección la efeméride
cuatricentenaria de la delicada sirena veneciana Barbara Strozzi, que
probablemente p...
Los seis científicos ciegos y el elefante
-
La historia de los seis sabios ciegos y el elefante, originaria de la
India, es una de las parábolas que más han entusiasmado a diversas
religiones, y se...
San Michele
-
por Ernesto Hernández Busto Es domingo, y el vaporetto avanza a un ritmo
plácido, de mecedora familiar y siesta de abuelos, hasta que suelta en el
muelle a...
Explicaciones
-
A ver, que todo esto es más sencillo de lo que parece: la ministra de
Justicia nunca llamó *maricón* con "c" al juez *Marlaska *"con k", ya que
eso sería u...
Blake Little
-
It's been a long time since my last post, but this excellent series by Blake
Little is certainly reason for a foray out of retirement. Stellar work!
You...
Arrow: Coordenadas geográficas
-
[image: Los cuatro logos de Supergirl, Arrow, The Flash y Legends of
Tomorrow]
Hace ya varios meses me decidí a despertar este blog, pero la verdad es no ...
Ginebra
-
De camino hacia el cementerio donde está enterrado Borges se pasa junto a
un parque a cuya entrada hay media docena de grandes tableros de ajedrez,
blancos...
El hombre sobre mi conciencia
-
Hace más de veinte años que vive dentro de “La insoportable levedad del
ser”. Se me olvida que está allí hasta que saco el libro de la estantería,
y se abr...
Un récord escondido
-
Más de 2 millones de kilometros cuadrados superior a la extensión normal
del hielo que rodea la Antártida en estas fechas. Récord de anomalía
positiva desd...
-
*Seis son, según el profesor de Harvard (Niall Ferguson), las razones que
instauraron aquel predominio (el de la cultura occidental): la competencia
que ...
Nos mudamos de dirección
-
Nos mudamos a wordpress. Estos últimos días el blog ha estado bastante
parado. Se debe en parte a que nos vamos a una nueva dirección en la red. A
partir d...
Circus again
-
¿Recuerdan Soldado, sastre, calderero, espía? Algo escribí sobre su
adaptación televisiva aquí. Pues este año se estrena la versión
cinematográfica que pin...
Congelado, que no muerto
-
Siguiendo mi habitual tendencia ciclotímica, ando ahora concentrado en mi
yo viajero. He remozado el viejo Paseante Invisible y le estoy dedicando
las aten...
Ya no hay hombres
-
Leo en el Babelia que me pillo el artículo sobre el libro de la semana, no
es una novela sino un libro de ensayo, de antropología filosófica además,
una ob...
Las imágenes y archivos de audio y vídeo que aparecen en este blog han sido incluidos en él por motivos ilustrativos o didácticos, sin ánimo de lucro, bajo el término del uso razonable (fair use). Si en cualquier caso usted es propietario de alguno de esos elementos y desea retirarlo, basta con que me remita un correo electrónico y lo haré inmediatamente.
4 comentarios:
Pablo, me ha encantado la sinfonía de Chapí! Muy beethoveniana, jeje. La verdad es que si gente como él hubiera nacido en Francia o Alemania otro gallo les hubiera cantado... aunque por otra parte no tendríamos todas esas zarzuelas maravillosas que nadie más tiene.
Creo que intentaré hacerme con el disco. Cuánto se aprende leyéndote! es una gozada este blog, gracias :-)
Lo del pensamiento navarro (y la música militar) como gran oximoron siempre me ha encantado.
Y estoy con Papagena, las zarzuelas de Chapí son maravillosas (vale, sí, soy zarzuelera de pro, las escuchaba de chica en casa de mi abuela y siempre me han gustado).
Gracias, Papagena, y si gusta, pues a disfrutarla. El disco está bien, ¡pero Chapí no es Beethoven! :-)
Gin, ¿y por qué no inventamos el género de la microzarzuela? Quiero el primer libreto para mañana...
Yo también escuchaba zarzuela de pequeña en casa de mi abuela!!! de hecho, de ahí me viene la afición. Y de ahí al género lírico... ella adoraba a Alfredo Kraus, Pilar Lorengar y Manuel Ausensi :-)
Publicar un comentario